jueves, 1 de octubre de 2009

Sólo tú...

Sólo tú, solamente tú sabes cual es mi necesidad en este momento, solamente tú sabes que es lo que siento, cada vez que caigo me tomas de la mano para levantarme, cada vez que lloro me secas las lágrimas con tú mano, haces que cada día sea maravilloso, llenándolos de amor, de alegria, de felicidad, de cosas nuevas y positivas para mí. Solamente tú puedes levantarme a pesar de cualquier situación que esté enfrentando, a pesar de como me sienta, sólo tú puedes amarme a pesar de haber sido una pecadora de palabra, obra y omisión. Y gracias a tí esos pecados han sido perdonados y mi corazón te pertenece en carne y alma. Gracias Señor por no dejarme sola en ningún momento de mi vida. Mi fé está en tí y tu harás lo que sea mejor para mí.

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